La ciberanimación es una praxis
sociocultural de carácter pedagógico que tiene como objetivo la mejora de la calidad de vida de los
ciudadanos a través de la creación de redes y comunidades sociales de carácter solidarias con la
finalidad de asegurar la sostenibilidad de las comunidades humanas.
La
ciberanimación genera y optimiza las dinámicas socioculturales que se hacen
presentes tanto en los espacios virtuales interconectados en red como en los
espacios vivenciales para generar proyectos cooperativos de estructuración de
un tejido social solidario, participativo y multicultural que desarrollen
modelos de organización social sostenibles e inclusivos.
La ciberanimación pone en
contacto a los individuos y los colectivos sociales para generar dinámicas comunicativas interactivas que, a
partir de identidades múltiples coincidentes, desarrollen nuevas identidades
colectivas colaborativas capaces de estructurar modelos de organización social
solidarios y sostenibles.
La ciberanimación desarrolla una
cultura y unas dinámicas de la participación que generan acciones colectivas de
presencia y participación en el debate y la toma de decisión en el ámbito de
las relaciones sociales y las dinámicas de poder y organización sociocultural.
La ciberanimación, en cuanto
práctica sociopedagógica, genera su acción a partir de la problematización de
la realidad social. Son los problemas e inquietudes de la vida cotidiana los
que son compartidos en Red y objetivados a partir de la participación
interactiva y la conexión de Redes, generando nuevas acciones que, optimizando
las potencialidades del ciberespacio, se proyectan sobre la vida cotidiana de
los individuos y sus colectividades.
En este sentido la
ciberanimación, en cuanto práctica digital de la animación sociocultural, se
caracteriza por:
- La
comunicación y la participación horizontal como alternativa a la
intervención jerarquizada.
- Los
proyectos colaborativos como alternativa a los proyectos de intervención
planificados de arriba a abajo.
- La
participación como consecuencia de la conectividad, la confluencia de
identidades y las inquietudes comunes.
- La
mediación como alternativa a la intervención del profesional por y para los
ciudadanos.
- La
prioridad de las ideas y propuestas (contenidos) sobre el continente: actividades,
recursos, soportes e incluso software.
- La
convergencia mediática como fórmula de acceso a la información, a la
comunicación y al análisis de la realidad social.
- La
conexión de Redes como fórmula de organización social y de participación en el
debate y la toma de decisión.
- La
ausencia de principios universales y, en consecuencia, una comunicación basada
en las ideas, inquietudes, intereses e identidades individuales y colectivas.
- Una cultura de la individualidad y de la
colectividad como confluencia de intereses y deseos de los individuos, de forma
solidaria y colaborativa.